miércoles, 19 de noviembre de 2008
el sonido mueve
entrá a: http://www.prodradeci.podomatic.com/
para escuchar los trabajos finales, documentales sonoros sobre una organización social cordobesa, realizados por los estudiantes del ciclo 2008
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jueves, 23 de octubre de 2008
9 preguntas frecuentes acerca de la producción artística x Gastón Montells - Colectivo La Tribu
¿Qué es la artística de una radio?
La dimensión artística es la traducción comunicacional del proyecto político. Es decir, las estrategias de producción que se toman para convertir un objetivo en una pieza sonora que pueda interpelar al oyente comunicando un mensaje. En ese texto sonoro está expresada la perspectiva editorial, los rasgos singulares de la identidad de esa radio y la forma en que se decide poner en juego ese contenido apelando a los recursos de experimentación sonora.
¿En qué momentos de una programación hay elementos artísticos?
La artística es un modo de convertir objetivos, intenciones, principios y fundamentos en hechos comunicacionales.
Por eso todo lo que aparece presente en una programación debería responder a una estrategia. Desde el horario en que salen los distintos programas hasta sus nombres, el perfil de los conductores, las ideas plasmadas en sus separadores y las cortinas musicales elegidas como soporte de la enunciación.
De todos modos, si tuviésemos que armar una tipología de elementos artísticos podríamos enumerar acá los principales: las piezas institucionales, las aperturas, separadores, cierres de programas, las publicidades y campañas, los criterios musicales, las cortinas, los efectos especiales, la “selección” de las voces de los conductores (bajo la premisa de pensar qué tipo de voz, no por su “calidad técnica” sino por su expresividad, léxico, tono, carisma, claridad, etc., traduce mejor la idea a comunicar).
Y por otro lado la elección de un formato para producir un contenido es una decisión artística que pone en juego definiciones periodísticas sujetas a la política informativa del medio, al destinatario estratégico, al horario y tipo de programa, y a la competencia que el interlocutor de ese mensaje tiene al decodificarlo.
¿Para qué sirve la artística de una radio?
Principalmente para dar cuenta de las definiciones estratégicas de ese proyecto.
La artística es una dimensión porque atraviesa transversalmente cada una de las decisiones del aire. Desde qué voces son elegidas para decir los mensajes hasta los criterios musicales y el ritmo de cada segmento horario.
La artística tiene una doble función indisociable. Por un lado a través de sus formatos constituye el espacio donde la radio se dice a sí misma. Y en ese decirse evidencia una mirada del mundo, algunas alianzas y un modo de apropiarse del lenguaje radiofónico.
Por eso la información puntual de una pieza institucional, cuña, spot, sigla son los datos identitarios por excelencia: el nombre, el dial, un eslogan y el guiño enunciativo puesto en juego en la intención de la voz del texto.
Donde el nombre, dial y eslogan funcionan como coordenadas de ubicación de esa radio.
Por otro lado esos elementos identificatorios funcionan a la vez como disciplinantes del aire. Como elementos de costura de la programación. Piezas organizadoras.
Las tandas mucho antes de ser espacios publicitarios cumplen la tarea del reloj. Marcan el paso del tiempo. Dividen, segmentan.
Las aperturas, separadores y cierres de programas además de ser portadores de sentido son recursos de orden, de articulación del aire. De división de bloques, secciones y contenidos.
En las piezas artísticas se manifiestan los principios de ese medio. Por eso la artística es el espacio de síntesis donde se encuentran lo dicho y el modo de decirlo.
De la discusión forma/contenido, la artística evidencia que esas características analíticas son indisociables en la práctica. La forma dice, el contenido formatea.
Vamos a un ejemplo donde se pone en juego la dimensión artística de una radio. Pensemos que queremos trabajar el contenido “Abuso sexual infantil”. Y que nuestra intención es identificar un destinatario de 8 a 12 años de edad.
Una pregunta inicial para abordar la producción será: ¿qué formas existen radiofónicamente para tratar este tema que puedan ser más apropiadas para dialogar con chicos y chicas de esa edad? ¿Será mejor convertir ese contenido en un radioteatro o conviene hacer un informe periodístico? ¿Recurriremos a formas del género dramático o a tácticas periodísticas clásicas?
Probablemente acordemos que la eficacia de la comunicación esté además de en la claridad del mensaje en la forma asumida para trasladarlo.
Entonces acaso trabajemos, en nuestro ejemplo, con recursos disponibles en el campo de los dramatizados antes que técnicas periodísticas un poco más alejadas de la cotidianidad supuesta de esos niños y niñas.
¿Por dónde se empieza a producir una pieza artística?
Por una idea a comunicar.
A partir de un objetivo, se escriben o buscan textos que mejor expresen la intención esperada. Con ese borrador textual se buscan universos sonoros capaces de “traducir” la intención de ese texto, no necesariamente el texto en términos literales, recurriendo a la capacidad expresiva y experimental del trabajo conjunto del productor y editor de la pieza. En los términos del conocimiento del marco institucional y el perfil de la emisora. Por eso siempre las estrategias de producción deben estar en relación a esas definiciones.
Probablemente seas vos solo/a el/la que redacta, produce, edita y pauta el spot o saca al aire el formato sonoro. De todos modos lo más conveniente es trabajar en equipo porque la creatividad se potencia en el intercambio, el juego y las dinámicas grupales.
¿Cómo se hace una pieza original y creativa?
La creatividad y la originalidad son contextuales. No significan lo mismo en todos lados.
Cuando se produce se lo hace siempre en instancias ya decodificadas, es decir, sin poder desmarcarse de lo ya producido por otros antes. Entonces más que preocuparnos por la originalidad hay que concentrarse en la claridad del sentido del texto disparado.
En esa claridad va la eficacia.
La creatividad conduce a la originalidad. Pero lo original no necesariamente es un valor.
A veces una pieza original es incomprendida o poco útil. De ahí que debamos tener bien en claro que es lo que queremos que suceda con lo que hacemos.
Es cierto que algo original se recuerda mejor que algo ya escuchado con recurrencia. Pero que se recuerde la pieza no quiere decir que se recuerde el mensaje, o la marca, o lo que sea que pretendamos comunicar.
De ahí que debamos intentar un equilibrio entre creatividad y claridad.
Ya que a nuestras exigencias de producción le corresponden prácticas de recepción que no podemos desconocer y donde, por suerte, el destinatario establece con nuestro mensaje sus propias estrategias de negociación y aceptación.
Lo importante es encontrar un modo claro, sencillo y creativo que a la vez de comunicar un mensaje pueda convocar a la imaginación de aquel interpelado para permitirnos dialogar.
¿Qué tiene que tener una pieza para ser “buena”?
Ante todo una idea clara.
Luego una resolución creativa entendiendo a la creatividad como la capacidad de la producción de sintetizar relevancia y atracción. Sorpresa y contundencia. Imprevisto pero claridad. Pertinencia.
Es importante que en esa síntesis la pieza promueva a la acción.
La acción será la consecuencia del mensaje en el que lo recibe.
Por último, que provoque el deseo de volver a oír.
¿Cuánto tiene que durar un spot de radio?
Lo que sea necesario para sintetizar una idea.
El problema de la duración es un problema del mercado, porque los segundos se pagan.
Cambiemos la palabra “duración” por la palabra “intensidad”.
Pensemos entonces que una pieza no pierda su intensidad. Si empieza a perderla, pierde contundencia.
La noción del tiempo está ligada a la concentración. A la capacidad de alguien de prestarle atención a algo. Por eso, más allá de los parámetros convencionales (que dicen que un promedio tipo es entre los 20 y 35 segundos), el tiempo es lo que necesita la pieza para decirse sin correr peligros de matarse a sí misma por dispersa o inconducente.
Si nos gustan las fórmulas hay una bastante sencilla. La ley de las 4 C. Dice que las piezas deben ser “cortas, concretas, completas y creativas”.
¿Cómo se hace para sintetizar una idea en 20 segundos?
Logrando abstraer. Sintetizar es tal vez lo más difícil de la producción. Poder, en poco tiempo y con los menores recursos posibles, decir un mensaje de modo a la vez claro y creativo. Es decir, que llame la atención pero que además le sea útil al que lo escuche.
La mejor manera es pensar de qué modo el texto y los recursos sonoros se complementan.
Pensemos dos universos, uno conceptual y otro sonoro.
Llenémoslos de recursos disponibles. En el primero las palabras, frases, asociaciones textuales, que mejor creamos que dicen lo que queremos comunicar.
En el segundo nuestros sonidos - fuerza. La lista de recursos sonoros, sean estos efectos artificiales o canciones o sonidos naturales, que a su modo y convocados construyen el escenario que facilitará que el texto pueda decirse.
La mezcla de ambos es enhebrar un hilo en una aguja.
¿Cuándo está terminada la producción de una pieza?
Cuando se considera que las ideas de la producción destinadas a la pieza empiezan a repetirse.
La recomendación es: al rato largo de trabajar en la misma pieza, parar, hacer otra cosa, alejarse de esa producción y luego volver a oírla. Ese distanciamiento es clave para el que la hace. Para entenderla integralmente.
La esencia de la terminación está en hacerla oír a otros antes de ponerla al aire.
Identificar sus debilidades. Potenciar sus fortalezas. Intervenirla como una cirugía.
Considerar que la producción creativa es un proceso. Que como tal no puede sino leérselo en continuidad.
Lo que hacemos a través de la dimensión artística es dotar de identidad. Una identidad que responde a una estrategia integral que de todos modos aparece a través de fragmentos en distintos momentos del día. Y que seguramente el oyente la escucha de modo discontinuo.
Se trata de constituir el perfil del proyecto a partir de una estrategia que contiene decisiones de producción capaces de convertir objetivos y principios en fragmentos de aire. Con las leyes del audio.
Si la pieza, una vez al aire, convoca a reflexionar, molestarse, moverse, cuestionar, reír, bailar, enojarse o pensar, a partir de eso escuchado, otra cosa, entonces la pieza empieza a ser lo buscado en el que la encontró. •
La dimensión artística es la traducción comunicacional del proyecto político. Es decir, las estrategias de producción que se toman para convertir un objetivo en una pieza sonora que pueda interpelar al oyente comunicando un mensaje. En ese texto sonoro está expresada la perspectiva editorial, los rasgos singulares de la identidad de esa radio y la forma en que se decide poner en juego ese contenido apelando a los recursos de experimentación sonora.
¿En qué momentos de una programación hay elementos artísticos?
La artística es un modo de convertir objetivos, intenciones, principios y fundamentos en hechos comunicacionales.
Por eso todo lo que aparece presente en una programación debería responder a una estrategia. Desde el horario en que salen los distintos programas hasta sus nombres, el perfil de los conductores, las ideas plasmadas en sus separadores y las cortinas musicales elegidas como soporte de la enunciación.
De todos modos, si tuviésemos que armar una tipología de elementos artísticos podríamos enumerar acá los principales: las piezas institucionales, las aperturas, separadores, cierres de programas, las publicidades y campañas, los criterios musicales, las cortinas, los efectos especiales, la “selección” de las voces de los conductores (bajo la premisa de pensar qué tipo de voz, no por su “calidad técnica” sino por su expresividad, léxico, tono, carisma, claridad, etc., traduce mejor la idea a comunicar).
Y por otro lado la elección de un formato para producir un contenido es una decisión artística que pone en juego definiciones periodísticas sujetas a la política informativa del medio, al destinatario estratégico, al horario y tipo de programa, y a la competencia que el interlocutor de ese mensaje tiene al decodificarlo.
¿Para qué sirve la artística de una radio?
Principalmente para dar cuenta de las definiciones estratégicas de ese proyecto.
La artística es una dimensión porque atraviesa transversalmente cada una de las decisiones del aire. Desde qué voces son elegidas para decir los mensajes hasta los criterios musicales y el ritmo de cada segmento horario.
La artística tiene una doble función indisociable. Por un lado a través de sus formatos constituye el espacio donde la radio se dice a sí misma. Y en ese decirse evidencia una mirada del mundo, algunas alianzas y un modo de apropiarse del lenguaje radiofónico.
Por eso la información puntual de una pieza institucional, cuña, spot, sigla son los datos identitarios por excelencia: el nombre, el dial, un eslogan y el guiño enunciativo puesto en juego en la intención de la voz del texto.
Donde el nombre, dial y eslogan funcionan como coordenadas de ubicación de esa radio.
Por otro lado esos elementos identificatorios funcionan a la vez como disciplinantes del aire. Como elementos de costura de la programación. Piezas organizadoras.
Las tandas mucho antes de ser espacios publicitarios cumplen la tarea del reloj. Marcan el paso del tiempo. Dividen, segmentan.
Las aperturas, separadores y cierres de programas además de ser portadores de sentido son recursos de orden, de articulación del aire. De división de bloques, secciones y contenidos.
En las piezas artísticas se manifiestan los principios de ese medio. Por eso la artística es el espacio de síntesis donde se encuentran lo dicho y el modo de decirlo.
De la discusión forma/contenido, la artística evidencia que esas características analíticas son indisociables en la práctica. La forma dice, el contenido formatea.
Vamos a un ejemplo donde se pone en juego la dimensión artística de una radio. Pensemos que queremos trabajar el contenido “Abuso sexual infantil”. Y que nuestra intención es identificar un destinatario de 8 a 12 años de edad.
Una pregunta inicial para abordar la producción será: ¿qué formas existen radiofónicamente para tratar este tema que puedan ser más apropiadas para dialogar con chicos y chicas de esa edad? ¿Será mejor convertir ese contenido en un radioteatro o conviene hacer un informe periodístico? ¿Recurriremos a formas del género dramático o a tácticas periodísticas clásicas?
Probablemente acordemos que la eficacia de la comunicación esté además de en la claridad del mensaje en la forma asumida para trasladarlo.
Entonces acaso trabajemos, en nuestro ejemplo, con recursos disponibles en el campo de los dramatizados antes que técnicas periodísticas un poco más alejadas de la cotidianidad supuesta de esos niños y niñas.
¿Por dónde se empieza a producir una pieza artística?
Por una idea a comunicar.
A partir de un objetivo, se escriben o buscan textos que mejor expresen la intención esperada. Con ese borrador textual se buscan universos sonoros capaces de “traducir” la intención de ese texto, no necesariamente el texto en términos literales, recurriendo a la capacidad expresiva y experimental del trabajo conjunto del productor y editor de la pieza. En los términos del conocimiento del marco institucional y el perfil de la emisora. Por eso siempre las estrategias de producción deben estar en relación a esas definiciones.
Probablemente seas vos solo/a el/la que redacta, produce, edita y pauta el spot o saca al aire el formato sonoro. De todos modos lo más conveniente es trabajar en equipo porque la creatividad se potencia en el intercambio, el juego y las dinámicas grupales.
¿Cómo se hace una pieza original y creativa?
La creatividad y la originalidad son contextuales. No significan lo mismo en todos lados.
Cuando se produce se lo hace siempre en instancias ya decodificadas, es decir, sin poder desmarcarse de lo ya producido por otros antes. Entonces más que preocuparnos por la originalidad hay que concentrarse en la claridad del sentido del texto disparado.
En esa claridad va la eficacia.
La creatividad conduce a la originalidad. Pero lo original no necesariamente es un valor.
A veces una pieza original es incomprendida o poco útil. De ahí que debamos tener bien en claro que es lo que queremos que suceda con lo que hacemos.
Es cierto que algo original se recuerda mejor que algo ya escuchado con recurrencia. Pero que se recuerde la pieza no quiere decir que se recuerde el mensaje, o la marca, o lo que sea que pretendamos comunicar.
De ahí que debamos intentar un equilibrio entre creatividad y claridad.
Ya que a nuestras exigencias de producción le corresponden prácticas de recepción que no podemos desconocer y donde, por suerte, el destinatario establece con nuestro mensaje sus propias estrategias de negociación y aceptación.
Lo importante es encontrar un modo claro, sencillo y creativo que a la vez de comunicar un mensaje pueda convocar a la imaginación de aquel interpelado para permitirnos dialogar.
¿Qué tiene que tener una pieza para ser “buena”?
Ante todo una idea clara.
Luego una resolución creativa entendiendo a la creatividad como la capacidad de la producción de sintetizar relevancia y atracción. Sorpresa y contundencia. Imprevisto pero claridad. Pertinencia.
Es importante que en esa síntesis la pieza promueva a la acción.
La acción será la consecuencia del mensaje en el que lo recibe.
Por último, que provoque el deseo de volver a oír.
¿Cuánto tiene que durar un spot de radio?
Lo que sea necesario para sintetizar una idea.
El problema de la duración es un problema del mercado, porque los segundos se pagan.
Cambiemos la palabra “duración” por la palabra “intensidad”.
Pensemos entonces que una pieza no pierda su intensidad. Si empieza a perderla, pierde contundencia.
La noción del tiempo está ligada a la concentración. A la capacidad de alguien de prestarle atención a algo. Por eso, más allá de los parámetros convencionales (que dicen que un promedio tipo es entre los 20 y 35 segundos), el tiempo es lo que necesita la pieza para decirse sin correr peligros de matarse a sí misma por dispersa o inconducente.
Si nos gustan las fórmulas hay una bastante sencilla. La ley de las 4 C. Dice que las piezas deben ser “cortas, concretas, completas y creativas”.
¿Cómo se hace para sintetizar una idea en 20 segundos?
Logrando abstraer. Sintetizar es tal vez lo más difícil de la producción. Poder, en poco tiempo y con los menores recursos posibles, decir un mensaje de modo a la vez claro y creativo. Es decir, que llame la atención pero que además le sea útil al que lo escuche.
La mejor manera es pensar de qué modo el texto y los recursos sonoros se complementan.
Pensemos dos universos, uno conceptual y otro sonoro.
Llenémoslos de recursos disponibles. En el primero las palabras, frases, asociaciones textuales, que mejor creamos que dicen lo que queremos comunicar.
En el segundo nuestros sonidos - fuerza. La lista de recursos sonoros, sean estos efectos artificiales o canciones o sonidos naturales, que a su modo y convocados construyen el escenario que facilitará que el texto pueda decirse.
La mezcla de ambos es enhebrar un hilo en una aguja.
¿Cuándo está terminada la producción de una pieza?
Cuando se considera que las ideas de la producción destinadas a la pieza empiezan a repetirse.
La recomendación es: al rato largo de trabajar en la misma pieza, parar, hacer otra cosa, alejarse de esa producción y luego volver a oírla. Ese distanciamiento es clave para el que la hace. Para entenderla integralmente.
La esencia de la terminación está en hacerla oír a otros antes de ponerla al aire.
Identificar sus debilidades. Potenciar sus fortalezas. Intervenirla como una cirugía.
Considerar que la producción creativa es un proceso. Que como tal no puede sino leérselo en continuidad.
Lo que hacemos a través de la dimensión artística es dotar de identidad. Una identidad que responde a una estrategia integral que de todos modos aparece a través de fragmentos en distintos momentos del día. Y que seguramente el oyente la escucha de modo discontinuo.
Se trata de constituir el perfil del proyecto a partir de una estrategia que contiene decisiones de producción capaces de convertir objetivos y principios en fragmentos de aire. Con las leyes del audio.
Si la pieza, una vez al aire, convoca a reflexionar, molestarse, moverse, cuestionar, reír, bailar, enojarse o pensar, a partir de eso escuchado, otra cosa, entonces la pieza empieza a ser lo buscado en el que la encontró. •
lunes, 22 de septiembre de 2008
El documental radiofónico
“El documental nos permite hacer drama de nuestra vida diaria y poesía de nuestros problemas cotidianos.” Nestor Hugo Cárcamo.
CARACTERÍSTICAS: El documental es más que una simple idea: es una forma de comunicación pública que va más allá de la mera presentación de los hechos compilados. Pero para esto debe haber un propósito social en la utilización de la tecnología, a fin de hacer posible el impacto comunicativo.
Este valioso formato enuncia cosas, hechos, con un propósito definido. Su meta es iniciar un proceso que culmine en una acción pública destinada a influir, persuadir, modificar aquellos aspectos o personas que configuran o son responsables de un orden social injusto.
El documental es una forma radial creativa en la que se trata un tema único, utilizando una, varias o todas las técnicas radiofónicas, con el énfasis puesto en los acontecimientos reales y la gente real que, en lo posible, nos cuente sus propias experiencias reales.
Partiendo de esta base, mediante el documental podremos: recrear un acontecimiento histórico; comentar condiciones sociales; presentar la biografía de una persona; ofrecer diferentes opiniones sobre un tema; realizar un recuento desapasionado sobre un tópico.
El documental forma al oyente, ya que le muestra determinados aspectos de un acontecer que no eran de su conocimiento. Contiene las tres formas de expresión periodísticas: la información pura, la interpretación y la opinión.
No está regido por la urgencia ni la instantaneidad.
INVESTIGACIÓN: Es una pieza radiofónica que estudia la realidad desde el mayor número posible de ángulos.
Utiliza un método de investigación extraído de las ciencias sociales. Hablamos de investigación para la producción. Los pasos y etapas son semejantes a los de una investigación social. Partimos de un proyecto de investigación, seguimos con la recolección de datos, luego clasificamos y ordenamos la información, y por último establecemos las conclusiones.
ESTETICA: Rigurosidad en la investigación y creatividad en la construcción sonora. Combinar la ética periodística con la estética radiofónica. Articular los propósitos intelectuales y emocionales. Humanizar las historias y los hechos que relatamos. El documental es un formato apropiado para ir descubriendo, en el juego de la combinación, las posibilidades del lenguaje radiofónico, por una parte, pero también nos permite ir descubriendo la importancia de lo estético en esas combinaciones sonoras. El arte de combinar sonidos para que la comunicación no sólo sea información.
ESTRUCTURA: La estructura es cerrada. Se organiza en torno a un eje temático. Contiene segmentos narrativos, descriptivos y de opinión.
La riqueza expresiva del doc. nos permite alternar diversos formatos en una sola pieza radiofónica. Al diseñar un doc. debemos saber que los monólogos, dialogos, entrevistas, comentarios, crónicas, dramatizaciones, efectos sonoros y música deben combinarse para crear una pieza radiofónica que sea al mismo tiempo, profunda y esclarecedora, dinámica y entretenida.
- Información: datos, noticias, crónicas, informes, documentación.
- Ambiente: espacio físico, formas y aspectos de las cosas, descripción de las personas, el clima, el ambiente sonoro.
- Acción: La narración viva de los hechos. El desarrollo de una historia. La cronología no implica necesariamente un montaje lineal, puede incluir saltos en el tiempo y acciones simultáneas.
- Testimionios: Impresiones de los protagonistas y testigos, declaraciones públicas, entrevistas de opinión, encuestas sobre el tema tratado.
- Ilustraciones: para hacer más ágil y agradable del desarrollo del tema se pueden utilizar: recursos sonoros, copetería, ráfagas y cortinas musicales, canciones alusivas, efectos sonoros, silencios.
EDICIÓN: Para lograr comunicar todo esto por medio de sonidos, surge la imprescindible necesidad de editar. Es en la edición donde el documental adquiere su coherencia y define su mensaje, generando en los destinatarios una reflexión y/o un cambio de actitud. El montaje permite una estructura más elaborada y una selección más precisa.
El objetivo del documental es satisfacer una necesidad informativa ampliada, profundizando en las causas y consecuencias, explicando detalles, analizando, relacionando, contextualizando. Pero también debe agregarse una concepción estética, generando emociones y apelando a la sensibilidad del oyente.
Lic. Pablo Ramos
CARACTERÍSTICAS: El documental es más que una simple idea: es una forma de comunicación pública que va más allá de la mera presentación de los hechos compilados. Pero para esto debe haber un propósito social en la utilización de la tecnología, a fin de hacer posible el impacto comunicativo.
Este valioso formato enuncia cosas, hechos, con un propósito definido. Su meta es iniciar un proceso que culmine en una acción pública destinada a influir, persuadir, modificar aquellos aspectos o personas que configuran o son responsables de un orden social injusto.
El documental es una forma radial creativa en la que se trata un tema único, utilizando una, varias o todas las técnicas radiofónicas, con el énfasis puesto en los acontecimientos reales y la gente real que, en lo posible, nos cuente sus propias experiencias reales.
Partiendo de esta base, mediante el documental podremos: recrear un acontecimiento histórico; comentar condiciones sociales; presentar la biografía de una persona; ofrecer diferentes opiniones sobre un tema; realizar un recuento desapasionado sobre un tópico.
El documental forma al oyente, ya que le muestra determinados aspectos de un acontecer que no eran de su conocimiento. Contiene las tres formas de expresión periodísticas: la información pura, la interpretación y la opinión.
No está regido por la urgencia ni la instantaneidad.
INVESTIGACIÓN: Es una pieza radiofónica que estudia la realidad desde el mayor número posible de ángulos.
Utiliza un método de investigación extraído de las ciencias sociales. Hablamos de investigación para la producción. Los pasos y etapas son semejantes a los de una investigación social. Partimos de un proyecto de investigación, seguimos con la recolección de datos, luego clasificamos y ordenamos la información, y por último establecemos las conclusiones.
ESTETICA: Rigurosidad en la investigación y creatividad en la construcción sonora. Combinar la ética periodística con la estética radiofónica. Articular los propósitos intelectuales y emocionales. Humanizar las historias y los hechos que relatamos. El documental es un formato apropiado para ir descubriendo, en el juego de la combinación, las posibilidades del lenguaje radiofónico, por una parte, pero también nos permite ir descubriendo la importancia de lo estético en esas combinaciones sonoras. El arte de combinar sonidos para que la comunicación no sólo sea información.
ESTRUCTURA: La estructura es cerrada. Se organiza en torno a un eje temático. Contiene segmentos narrativos, descriptivos y de opinión.
La riqueza expresiva del doc. nos permite alternar diversos formatos en una sola pieza radiofónica. Al diseñar un doc. debemos saber que los monólogos, dialogos, entrevistas, comentarios, crónicas, dramatizaciones, efectos sonoros y música deben combinarse para crear una pieza radiofónica que sea al mismo tiempo, profunda y esclarecedora, dinámica y entretenida.
- Información: datos, noticias, crónicas, informes, documentación.
- Ambiente: espacio físico, formas y aspectos de las cosas, descripción de las personas, el clima, el ambiente sonoro.
- Acción: La narración viva de los hechos. El desarrollo de una historia. La cronología no implica necesariamente un montaje lineal, puede incluir saltos en el tiempo y acciones simultáneas.
- Testimionios: Impresiones de los protagonistas y testigos, declaraciones públicas, entrevistas de opinión, encuestas sobre el tema tratado.
- Ilustraciones: para hacer más ágil y agradable del desarrollo del tema se pueden utilizar: recursos sonoros, copetería, ráfagas y cortinas musicales, canciones alusivas, efectos sonoros, silencios.
EDICIÓN: Para lograr comunicar todo esto por medio de sonidos, surge la imprescindible necesidad de editar. Es en la edición donde el documental adquiere su coherencia y define su mensaje, generando en los destinatarios una reflexión y/o un cambio de actitud. El montaje permite una estructura más elaborada y una selección más precisa.
El objetivo del documental es satisfacer una necesidad informativa ampliada, profundizando en las causas y consecuencias, explicando detalles, analizando, relacionando, contextualizando. Pero también debe agregarse una concepción estética, generando emociones y apelando a la sensibilidad del oyente.
Lic. Pablo Ramos
martes, 10 de junio de 2008
El discurso argumentativo
Es la base de la opinión (columna o comentario) y supone una estructura fundamental:
- una proposición que debe ser demostrada: hipótesis
- argumentos para demostrar la verdad de la hipótesis (tesis adversa, refutaciones, contrarefutaciones, paradojas, analogías)
- conclusión o tesis demostrada
Se despliega en una serie de premisas basadas en ciertos fundamentos o juicios propios. Estos razonamientos pueden ser empíricos o de observación de la realidad, juicios de valor, que suponen una apreciación personal, y juicios normativos, tendientes a persuadir al interlocutor. Suele ser polifónico, apela a las múltiples voces que proporcionan las citas y las referencias a otros textos, siempre a través del uso de la primera persona.
- una proposición que debe ser demostrada: hipótesis
- argumentos para demostrar la verdad de la hipótesis (tesis adversa, refutaciones, contrarefutaciones, paradojas, analogías)
- conclusión o tesis demostrada
Se despliega en una serie de premisas basadas en ciertos fundamentos o juicios propios. Estos razonamientos pueden ser empíricos o de observación de la realidad, juicios de valor, que suponen una apreciación personal, y juicios normativos, tendientes a persuadir al interlocutor. Suele ser polifónico, apela a las múltiples voces que proporcionan las citas y las referencias a otros textos, siempre a través del uso de la primera persona.
martes, 22 de abril de 2008
ERRORES COMUNES EN EL LENGUAJE RADIOFONICO
La Preposición
Juan Manuel Rodríguez
Español por nacimiento, ecuatoriano por adopción, Decano de la Facultad de Comunicación de la Universidad San Francisco de Quito.
Correo-e:
Aunque no se refieren ni a la vitamina C ni al Calcio, las Ces del lenguaje periodístico son esenciales para evitar la ambigüedad, confusión y desinformación en la noticia. Claro, Conciso y Correcto son las tres característicasnecesarias de todo texto periodístico. Entre las palabras a las que debemos poner especial cuidado se halla la preposición, pre (antes) y posición, pues ocupa un lugar anterior al de otro término.
La preposición es un término de enlace, o sea,se antepone a un sustantivo para originar un complemento. El matiz en el uso de estas uniones es muy sutil por los variados sentidos que una misma preposición puede otorgar, como es el caso de “a” y “de”. Si tenemos las palabras “político” y “dinero”, podremos escribir una serie de significados diferentes como: “el político sin dinero” (sentido paradójico), “el político con dinero” (sentido real), “el político de dinero” (sentido aristocrático),“el político por dinero” (sentido teleológico), “el político bajo el dinero” (sentido ambiguo). En todas estas frases tenemos un término inicial y otro final que enlaza la preposición. El significado del enunciado y el uso de la preposición dependerán en muchos casos del verbo. Así: “El político de dinero” lo perdió en la última campaña, y ahora trabaja “el político por dinero”.
En nuestro medio es muy frecuente encontrar la expresión “casa de venta”. Una casa de venta es un supermercado o un comercio, por ejemplo esta es una casa de venta de carros. Si deseamos vender la propiedad, diremos “casa en venta”,“departamento en arriendo”. En estas expresiones el verbo está sobreentendido (elíptico). Si lo colocamos para que el sentido sea completo, tendríamos “pongo la casa en venta”, y jamás diríamos “pongo la casa de venta”. La preposición “de” produce muchos problemas en el uso porque es una de ésas que tienen múltiples significados cuando sirve de enlace.
Hace unos días apareció un titular que nos asombró por la ambigüedad. Y si el efecto que se deseaba era recapacitar en la claridad del texto se logró este cometido. “Fin a los ejecutivos interprovinciales” (El Comercio, abril 28, A1) era el título de este equívoco. De inmediato nos pareció que los ejecutivos entre espacios interprovinciales fueron aniquilados por alguna suerte de maleficio, venganza extraterrestre o genocidio, y aunque muchos ejecutivos debieran merecer una suerte de fin incruento, algunos también merecen salvarse. El periodista podría alegar que el antetítulo “transporte” restaba esa ambigüedad del encabezado. No es tan cierto. Queda todavía la duda si debía haber escrito “fin a los ejecutivos interprovinciales”, o “fin de los ejecutivos interprovinciales”. El problema con la preposición surge porque no sabemos ni sospechamos cuál es el verbo sobreentendido. Si lo que se sobreentiende resulta ser el verbo es, entonces la frase sería el fin de los ejecutivos,pero si el verbo elíptico es llegar, entonces diríamos “les ha llegado el fin a los ejecutivos interprovinciales”. De todos modos, la preposición “a” nos parece inexacta y crea confusión en el titular, pues ésta se utiliza para personas (mataron a los ejecutivos), mientras que los ejecutivos a los que se refería el periodista no eran individuos sino autobuses (cosas), el acusativo cuando nos referimos a cosas no suele llevar la preposición “a”.
El régimen
En la España del General, cuando una persona empezaba un plan para adelgazar y moderar la gula, antes de que la palabra dieta formara parte de nuestra cotidianidad, se decía que fulano estaba haciendo régimen. Cuando la palabra dieta reemplazó a régimen, este término fue relegado al uso de los políticos y gramáticos. El régimen gramatical es la dependencia que tienen entre sí las palabras, dependencia que se encarga de otorgar sentido a los enunciados. De manera restringida, régimen es la preposición que exige cada verbo o caso en las funciones gramaticales. El mal empleo de la preposición en el ejemplo de los“(autobuses) ejecutivos” es un problema de régimen.
En el mismo medio y día, en la página A2 (“Inseguridad e impunidad”), nos enfrentamos al problema de un periodismo que desea literarizar; sin embargo, no nos vamos a preocupar de este fenómeno estilístico sino de los errores de régimen. Se lee: “una ola de violencia estremeció a la capital del Perú”, debería haber quitado la preposición a, pues este acusativo se refiere a una cosa: “estremeció la capital”. “Lo acontecido hace recordar con espanto lo que sucedió en el Estadio Nacional de Lima, …, con motivo del encuentro…”, ¿no hubiera sido más claro, preciso y correcto poner “en el encuentro”? Lo que sucedió fue en el encuentro, jamás con motivo del encuentro. “Los ciudadanos de Quito mediten sobre los efectos colectivos”, ¿no deberá meditarse en los efectos colectivos?
En el periodismo radial y televisivo la preposición simple y natural se sustituye por locuciones que no solamente atentan contra el buen decir sino también contra la claridad y economía de las palabras. Expresiones como “a fin de que” (para), “por concepto de” (por), “ a causa de” (por),“en lo que respecta” (?), “a consecuencia de” (por), “con el propósito” (para), “con objeto de” (para),“al respecto” (?),son tan innecesarias como abundantes en nuestros reporteros. Un ejercicio para capacitar y desentumecer la vagancia reflexiva es sentarse ante el televisor e ir señalando las veces que los locutores se inflanpara decir tantas maravillas. Se asombrará de la cantidad de locuciones vacías de información, oscuras y sin régimen. Sería bastante prudente que los periodistas nos pongamos a régimen, a dieta de palabras, procurando la economía y concisión en el texto.
Ahora que los editores nos amenazan en páginas blancas con dejarnos sin la educación que proporciona la “escuela de la vida”, exijamos unos profesores más cuidadosos para esos centros de saber. Es cuestión de régimen político y gramatical.
Juan Manuel Rodríguez
Español por nacimiento, ecuatoriano por adopción, Decano de la Facultad de Comunicación de la Universidad San Francisco de Quito.
Correo-e:
Aunque no se refieren ni a la vitamina C ni al Calcio, las Ces del lenguaje periodístico son esenciales para evitar la ambigüedad, confusión y desinformación en la noticia. Claro, Conciso y Correcto son las tres característicasnecesarias de todo texto periodístico. Entre las palabras a las que debemos poner especial cuidado se halla la preposición, pre (antes) y posición, pues ocupa un lugar anterior al de otro término.
La preposición es un término de enlace, o sea,se antepone a un sustantivo para originar un complemento. El matiz en el uso de estas uniones es muy sutil por los variados sentidos que una misma preposición puede otorgar, como es el caso de “a” y “de”. Si tenemos las palabras “político” y “dinero”, podremos escribir una serie de significados diferentes como: “el político sin dinero” (sentido paradójico), “el político con dinero” (sentido real), “el político de dinero” (sentido aristocrático),“el político por dinero” (sentido teleológico), “el político bajo el dinero” (sentido ambiguo). En todas estas frases tenemos un término inicial y otro final que enlaza la preposición. El significado del enunciado y el uso de la preposición dependerán en muchos casos del verbo. Así: “El político de dinero” lo perdió en la última campaña, y ahora trabaja “el político por dinero”.
En nuestro medio es muy frecuente encontrar la expresión “casa de venta”. Una casa de venta es un supermercado o un comercio, por ejemplo esta es una casa de venta de carros. Si deseamos vender la propiedad, diremos “casa en venta”,“departamento en arriendo”. En estas expresiones el verbo está sobreentendido (elíptico). Si lo colocamos para que el sentido sea completo, tendríamos “pongo la casa en venta”, y jamás diríamos “pongo la casa de venta”. La preposición “de” produce muchos problemas en el uso porque es una de ésas que tienen múltiples significados cuando sirve de enlace.
Hace unos días apareció un titular que nos asombró por la ambigüedad. Y si el efecto que se deseaba era recapacitar en la claridad del texto se logró este cometido. “Fin a los ejecutivos interprovinciales” (El Comercio, abril 28, A1) era el título de este equívoco. De inmediato nos pareció que los ejecutivos entre espacios interprovinciales fueron aniquilados por alguna suerte de maleficio, venganza extraterrestre o genocidio, y aunque muchos ejecutivos debieran merecer una suerte de fin incruento, algunos también merecen salvarse. El periodista podría alegar que el antetítulo “transporte” restaba esa ambigüedad del encabezado. No es tan cierto. Queda todavía la duda si debía haber escrito “fin a los ejecutivos interprovinciales”, o “fin de los ejecutivos interprovinciales”. El problema con la preposición surge porque no sabemos ni sospechamos cuál es el verbo sobreentendido. Si lo que se sobreentiende resulta ser el verbo es, entonces la frase sería el fin de los ejecutivos,pero si el verbo elíptico es llegar, entonces diríamos “les ha llegado el fin a los ejecutivos interprovinciales”. De todos modos, la preposición “a” nos parece inexacta y crea confusión en el titular, pues ésta se utiliza para personas (mataron a los ejecutivos), mientras que los ejecutivos a los que se refería el periodista no eran individuos sino autobuses (cosas), el acusativo cuando nos referimos a cosas no suele llevar la preposición “a”.
El régimen
En la España del General, cuando una persona empezaba un plan para adelgazar y moderar la gula, antes de que la palabra dieta formara parte de nuestra cotidianidad, se decía que fulano estaba haciendo régimen. Cuando la palabra dieta reemplazó a régimen, este término fue relegado al uso de los políticos y gramáticos. El régimen gramatical es la dependencia que tienen entre sí las palabras, dependencia que se encarga de otorgar sentido a los enunciados. De manera restringida, régimen es la preposición que exige cada verbo o caso en las funciones gramaticales. El mal empleo de la preposición en el ejemplo de los“(autobuses) ejecutivos” es un problema de régimen.
En el mismo medio y día, en la página A2 (“Inseguridad e impunidad”), nos enfrentamos al problema de un periodismo que desea literarizar; sin embargo, no nos vamos a preocupar de este fenómeno estilístico sino de los errores de régimen. Se lee: “una ola de violencia estremeció a la capital del Perú”, debería haber quitado la preposición a, pues este acusativo se refiere a una cosa: “estremeció la capital”. “Lo acontecido hace recordar con espanto lo que sucedió en el Estadio Nacional de Lima, …, con motivo del encuentro…”, ¿no hubiera sido más claro, preciso y correcto poner “en el encuentro”? Lo que sucedió fue en el encuentro, jamás con motivo del encuentro. “Los ciudadanos de Quito mediten sobre los efectos colectivos”, ¿no deberá meditarse en los efectos colectivos?
En el periodismo radial y televisivo la preposición simple y natural se sustituye por locuciones que no solamente atentan contra el buen decir sino también contra la claridad y economía de las palabras. Expresiones como “a fin de que” (para), “por concepto de” (por), “ a causa de” (por),“en lo que respecta” (?), “a consecuencia de” (por), “con el propósito” (para), “con objeto de” (para),“al respecto” (?),son tan innecesarias como abundantes en nuestros reporteros. Un ejercicio para capacitar y desentumecer la vagancia reflexiva es sentarse ante el televisor e ir señalando las veces que los locutores se inflanpara decir tantas maravillas. Se asombrará de la cantidad de locuciones vacías de información, oscuras y sin régimen. Sería bastante prudente que los periodistas nos pongamos a régimen, a dieta de palabras, procurando la economía y concisión en el texto.
Ahora que los editores nos amenazan en páginas blancas con dejarnos sin la educación que proporciona la “escuela de la vida”, exijamos unos profesores más cuidadosos para esos centros de saber. Es cuestión de régimen político y gramatical.
miércoles, 2 de abril de 2008
Que hacés para vivir papi???
martes, 18 de marzo de 2008
Bienvenidos!!!
Hemos abierto este canal de comunicación para que podamos mantener contacto durante el cursado del taller. La idea del blog no es solo despejar sus dudas, sino también compartir material multimedia y conocer sus opiniones, con el objetivo de poder mantenernos en contacto más allá de las clases.
Esperemos que les sea de ayuda y que juntos podamos hacer del fabuloso y mágico arte de hacer radio, nuestra herramienta de cambio. Nos estamos escuchando.
Cátedra de Producción Radiofónica. Año 2008.
"El arte no es un espejo para reflejar la realidad, sino un martillo para darle forma." (Bertolt Brecht)
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